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jueves, 12 de abril de 2012

Statice

Statice, se llama Statice ( Limonium sinuatum) y no gerberas, ni alhelíes, ni jacintos, ni iris, ni el nombre de la madre de todas las flores ni nada que se le parezca. Simplemente Statice o también Estatice, al gusto. A fin de cuentas, como siempre, para seguir manteniendo la tradición, nada nuevo bajo el Sol. Sin remedio se llamaba la película.

Al tema, que es lo que realmente importa. No sé si os habéis fijado pero el exorno floral del paso de Nuestro Padre Jesús en la Oración del Huerto ha sido novedoso esta Semana Santa con respecto a otros años. Muchas han sido las personas a las que ha llamado la atención tanto la gama cromática utilizada como la peculiar distribución sobre el paso, la que permite esta curiosa flor cuyo nombre arriba hemos indicado y que se caracteriza, entre otras muchas cosas, por aguantar sin necesidad de agua bastantes más horas que otras.

Aclaradas tanto la filiación como las características del exorno utilizado, y para los que aún continuan creyendo que los pasos se montan y adornan solos y que no hace falta trabajarlos si para ello hay que renunciar a la cervecita o al cafelito, sin menoscabo de otras veleidades, traemos hoy unas fotos que demuestran justamente lo contrario.

A modo de crónica, para el que no lo sepa, deciros que este adorno floral, como refleja esta primera foto, se comenzó a realizar el Martes Santo por la mañana, con un primer trabajo -de chinos, casi-  que consitió en sujetar manojitos de flor a unos palillos de madera. Esta operación duró hasta las 20,30, momento en el que se comenzó a pinchar flor en el paso, tarea que hubo que suspender algo más de hora y media después por la inminencia de la entrada en la Parroquia de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Salud, la cual, como sabéis, tiene una Estación de su Vía Crucis en el interior del templo.

En primer plano el Statice

Durante todo el Miércoles Santo y gran parte del mismo Jueves por la mañana se siguió pinchando flor, consiguiendo acabar la encomienda mucho antes de los Santos Oficios (¡Hala, otra tradición rota! Señor, Señor, ¿dónde vamos a llegar?), para orgullo y satisfacción de todos cuantos por allí merodeamos. Inabarcable, os puedo dar fe de ello, el que sentían las dos personas que, con la inestimable ayuda de muchos de sus iguales, entregaron bastantes horas de su tiempo hasta conseguir el resultado final que todos tuvimos ocasión de contemplar.



A ellas dos, a los que no salen en las fotos, a todos los que durante estos días han estado trabajando para que su Hermandad pudiera hacerse simpar Cofradía por Jueves Santo, nuestro agradecido reconocimiento, nuestra sincera felicitación. Porque siempre hemos dicho que hay múltiples maneras de buscar la Gloria de Dios, no nos cabe ninguna duda de que entre ellas se encuentra una magnífica, la que cada Semana Santa tantos de vosotros utilizáis: trabajar con entusiamo, con ilusión, con entrega, con humildad, con fe, sólo por el simple deleite de mostrar, lo más dignamente posible, a este bendito pueblo a Nuestros Sagrados Titulares con todo lo que, humano o divino, tal hecho acarrea. Por tanto como aportáis a esta Centenaria Congregación, por esa esperanza nueva y vigorosa que vuestra juventud nos trae, muchas gracias. Seguro estoy, por ello pido, que Ellos con creces sabrán recompensaros. 

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