La primera lotería

Preliminar nota aclaratoria.- La Dirección General de Rigor Histórico de aqueste humilde blog no se hace en ningún modo responsable de alguno de los contenidos que, a continuación, se van a publicar ni entra a valorar las afirmaciones históricas en ellos vertidos. En tal caso, y como previo aviso a ilustrados comentaristas anónimos, las pertinentes precisiones, si es que caben, deberían ser dirigidas a quien corresponda o a quien se estime conveniente, nunca a nosotros, simples editores de unos documentos que, bien pertenecen al archivo de la propia Cofradía ó bien al de alguno de sus hermanos, y que sólo nos son cedidos para su publicación. Por tanto, ya puestos, seguimos sin saber cómo es posible que el decreto de última aprobación de nuestra Hermandad lo pudiera firmar un Obispo que llevaba tres años muerto, tal como se afirma en las patentes publicadas, ni tampoco la fecha exacta de la fundación de la Cofradía, que, aunque anterior a 1554, la podemos situar entre 1540 y 1550 -por pura y aplastante lógica-, si le parece bien a los ilustrados. Seguimos también sin saber con qué fecha se inició el culto hacia alguna de nuestras Benditas Devociones. En concreto, la primera referencia debidamente documentada que tenemos sobre "El Huerto" data del a.D. 1633, todo ello si le vuelve a parecer bien a los anónimos ilustrados.

Una vez, en previsión de futuros,  convenientemente aclaradas ciertas precisiones, pasemos a lo que nos interesa. Tal como afirmamos en entradas anteriores, la "Taleguilla" de 1971 supone el punto de inicio de lo que podríamos definir como historia contemporánea de nuestra Hermandad. Ya dijimos que en esa comida se compromete a una Junta de Gobierno,  encabezada por Pepe Portillo,  que está dispuesta a trabajar para cambiar el devenir, completamente negativo, de tantos acontecimientos como asolaban nuestra Hermandad en aquellas fechas.

El primer proyecto que se afronta, en 1972, es el traspaso del bordado de la túnica con la que procesionaba Nuestro Padre Jesús en la Oración del Huerto, que, debido a la antigüedad de su terciopelo, se encontraba en un lamentable estado. La ejecución del mismo se deja en manos de la Comunidad de Educandas del Colegio San Acisclo y Santa Victoria de Castro del Río, las cuales, a través de una de sus hermanas, la castreña Magdalena Díaz, que conocía a nuestro Albacea Mayor, el ya citado Pepe Portillo, se habían ofrecido para realizar el trabajo.

Tiempos, como tantos otros, de escasez y penuria económica, la deuda contraída se va a satisfacer con los beneficios obtenidos a través de un  novedoso recurso:  la venta de participaciones de lotería de Navidad. Aquí os dejo una de aquellas primeras, e históricas, papeletas.

Como podéis observar, las mismas se vendían a veinticinco pesetas, cinco duritos de aquellos tiempos, con un "tifus" -en el argot- de cinco pesetas, un durito. Se vendieron sesenta y cinco mil pesetas de lotería, de las que se obtuvo un beneficio de trece mil, importe ligeramente superior al que cobraron las monjas por el trabajo. Había nacido una nueva fórmula de financiación que, como podéis comprobar los hermanos cofrades cada año, ha llegado hasta nuestros días -y lo que queda, afirmaría nuestro ínclito tesorero-.

El resultado del traspaso del bordado de la túnica del Señor del Huerto lo podéis observar en las fotos de abajo; la primera con el paso antiguo, el famoso"cincelado en plata", y que recoge interesantes detalles; la segunda con el actual aún sin dorar. Ambas están realizadas en la década de los ochenta del siglo pasado y nos las ha facilitado nuestro hermano Juan Pinillos Criado.

P.S. Aunque esta Bendita Imagen no se procesiona desde 1994, sabéis que recibe culto en la Iglesia de Madre de Dios. La túnica objeto de esta entrada la conservamos debidamente en los armarios que, a tal fin, dispone nuestra Casa Hermandad. Allí la podréis apreciar con detalle. También, en cuanto vayamos completando la página dedicada a pasos y enseres, tendréis a vuestra disposición fotos específicas de ella.

P.S. 2: Amigo, a la hora y fecha en las que escribo estas palabras, como podrás comprobar y tal como ya te anuncié el otro día sin ser adivino, sigue el silencio, total y absoluto. Abrumador desconcierto. Saludos.

El traslado de la Buena Muerte

Mucha está siendo la información analizada en las últimas semanas. Fotos, documentos, artículos antiguos y modernos, la propia red de internet... están siendo escrutados por si en alguno pudiera encontrarse información, hasta ahora desconocida, y que resultara de interés. El objetivo primordial no es otro que dotar las páginas que estamos creando del máximo rigor posible en cuanto a la información que contienen. Tanto es así que uno de nuestros hermanos, que algo sabe de todo esto, lleva gran parte de sus vacaciones "pateando" la red a la búsqueda y captura de algún dato relativo a nuestra Hermandad ó a nuestro pueblo. Unos pocos son los que, hasta la fecha, ha encontrado en la ingente cantidad de archivos históricos que, gracias a su digitalización, están ya disponibles en Internet.

El que no aparece por ninguna parte, y no será por falta de esfuerzo, interés y de dejarse las pestañas leyendo y "traduciendo" el castellano antiguo de pleitos, testamentos, mandas y demás farragosa prosa leguleya, es el relativo a la fecha concreta de la fundación por la Orden Franciscana de nuestra Cofradía, y que hallazgos, llamémosles colaterales, apuntan bastante anterior a la contrastada y más antigua conocida, esto es, la del año de 1554 donde se produjo el pleito con los Carmelitas. De cualquier novedad tendréis cumplida información.

Por lo que respecta al equipo local, en servicio de guardia permanente, la misión autoencomendada es bastante más fácil: búsqueda de material en todo tipo de archivos recientes. De uno de ellos estamos haciendo un gran acopio de información antes que el paso del tiempo la haga desaparecer. Éste no es otro que el de la memoria de cuantos, de una u otra forma, han sido testigos directos o protagonistas de algún hecho destacable. Ése ha sido el método utilizado para contrastar muchos de los datos relativos a la intrahistoria más reciente de nuestra Hermandad.

Como llevamos casi toda la semana trabajando en nuestro Miércoles Santo, aquí os dejo hoy unas fotos de A.D. 2011 que recogen un acontecimiento casi desconocido para el gran público: el traslado del paso del Santísimo Cristo de la Buena Muerte desde nuestra Casa Hermandad, donde se ha exornado y preparado para el desfile, hasta la Parroquia de la Asunción, y del que el propio Michelna, en alguna ocasión anterior, nos ha dejado algún testimonio gráfico.

Conozcamos mejor las razones que dieron origen a esta singularidad -del traslado, no de los testimonios gráficos, que nos conocemos-. Como sabéis, en 1998 hubo que cerrar temporalmente al culto la Parroquia de la Asunción ante el estado ruinoso que presentaban alguno de sus elementos. Aquél Sábado Gloria de infausto recuerdo para todos los cruceros, nuestra Sede Canónica fue clausurada y nuestras Benditas Imágenes hubo que exponerlas al culto en la Iglesia del Carmen. Llegada la Cuaresma de 1999, se plantea a la superioridad eclesiástica la imposibilidad de hacer las Estaciones de Penitencia del Miércoles y Jueves Santo desde ningún templo de los existentes en el pueblo, ya que las medidas de nuestros pasos son ligeramente superiores a las del ancho de sus puertas. El cura párroco de aquél tiempo solicita por elevación el correspondiente permiso y, una vez concedido, nos autoriza a sacar nuestros desfiles procesionales desde la recién inaugurada Casa Hermandad que, construida concienzudamente al efecto, sí podía albergarnos sin más problema que el derivado de la estrechez relativa producida por el montaje y exorno simultáneo de los cinco pasos. Existen multitud de documentos gráficos que dan fe de cuanto aquí se afirma.

En el año 2000, felizmente reabierta al culto nuestra Sede Canónica, el Albacea Mayor por aquél entonces, Miguel Navajas Aparicio, sigue utilizando, sin embargo, las más cómodas y útiles infraestructuras de la Casa para "pinchar" la Imagen del Santísimo Cristo en su paso e insta a los responsables del adorno floral a realizarlo allí mismo también. Sólo quedaba resolver el traslado. Aquél primer Martes Santo recluta para tan excelsa misión a cuantos jóvenes veían en el Llano de la Iglesia el desfile del Señor de la Salud, el cual tiene una de sus Estaciones en el interior del templo parroquial. Así pues, una vez alejada de allí la procesión, se procedió a trasladar al Santísimo Cristo de la Buena Muerte. De esta forma dio comienzo este hecho tan singular como desconocido. Así ha venido sucediéndose, como reflejan las fotos, hasta este año inclusive. Casi en familia al principio; cada vez más acompañados después; pronto pequeña, aunque fervorosa, multitud. Amparados siempre en el silencio de la noche y la estrechez sinuosa de las calles, desde una de Sus Casas hasta la otra, hasta que Él quiera.

P.S. Amigo, como podrás comprobar, hasta la hora y fecha en las que se escriben estas palabras, tal como -sin ser adivino- te anuncié el otro día, silencio. Tuyo no sé; mío, y lo afirmo con total y defraudada resignación, cada vez menos. Quiero seguir creyendo que sólo se trata de un período de altivez enajenada transitoria. Como sigan los delirios y tengamos que utilizar un sustantivo más rotundo que el señalado en negritas, que Dios nos pille confesados. Saludos.

Un Capataz, con mayúsculas

Según recogen en el día de hoy todos y cada uno de los medios informativos, sin distinción de tendencias o líneas ideológicas, la Jornada Mundial de la Juventud 2011 celebrada en Madrid ha sido un rotundo, inapelable e indiscutible éxito en todos los sentidos. Más de un millón y medio de peregrinos han querido libremente estar estos días junto al Vicario de Cristo, Su Santidad Benedicto XVI, que ayer, sobre las siete de la tarde, abandonó España.

Ya se habrán quedado descansando muchos. No todos por los mismos motivos. Si algunos dedicaran el mismo ímpetu a reflexionar que el que destinan a otros menesteres, deberían pararse a analizar con la mayor frialdad el siguiente dato: en el aeródromo de Cuatro Vientos, durante la Vigilia del sábado y la Santa Misa de ayer domingo, se congregaron mayor número de personas que votos tienen muchas formaciones políticas de este desdichado país.

Primeros datos para la meditación democrática y trascendental. Hay muchos más, que ya estoy preparando, y que resultan -y yo sin enterarme- verdaderamente demoledores para mis impuestos, y para los de todos, ojo. Ya veréis, ya veréis, cuánto cuesta al Estado Español toda una serie de organizaciones que, una gran mayoría de las veces, no se representan ni a sí mismas. Vamos, que si tuvieran que subsistir con el dinero que aportan sus seguidores -como hace la denostada y perseguida Iglesia Católica-, dicho al castreño modo, pasarían más penalidades que un caracol en un espejo.

Perdonad el inciso y pasemos a hablar de las cosas que más nos interesan. Dejemos a un lado esa dinámica demagógica y absurda a la que nos han intentado arrastrar. Porque aquí, en este blog, que fue creado al amparo de la Venerable Cofradía y Hermandad de la Santa Vera Cruz, de lo que realmente nos gusta hablar es de nuestra Hermandad, de nuestra Semana Santa. Eso sí -no nos duelen prendas en dar la razón a nuestros detractores-, con muchas imperfecciones, algún que otro desvarío, de vez en cuando con escaso rigor histórico, pero siempre con la mejor y más cofrade de las cruceras voluntades.

Tanto es así que durante estos últimos días, como habréis podido observar, llevamos poniendo en valor unas páginas adicionales del blog dedicadas tanto a los grupos humanos que conforman nuestra Hermandad, como a otros aspectos de la misma, su historia, sus Sagradas Imágenes, sus enseres, ... No es otro el objetivo que el de facilitar la mayor información posible a todos aquellos, especialmente cruceros, a los que pueda interesar. Dicen que no se puede debatir de un tema que se desconoce, del que no se tienen datos ni argumentos. En las citadas páginas tenéis a vuestra disposición muchos relativos a nuestra, más de cuatro veces y media, centenaria Institución.

La última de las citadas páginas que se ha completado, ha sido la dedicada a uno de los más dinámicos grupos humanos que tiene la gran suerte de atesorar nuestra Cofradía, los costaleros. Para llegar hasta aquí, muchas son las personas que han trabajado para hacer realidad aquella aspiración de tantos jóvenes cruceros. Una de ellas, a la que vamos a dedicar esta entrada, es Rafael Merina García, primer capataz de la primera cuadrilla que sacó la Bendita Imagen de Nuestra Madre, María Santísima de los Dolores.

Durante diez años, Rafa, como a él le gusta que le llamen -el sobrenombre lo dejo aparte aunque me consta que está en la mente de todos-, fue el auténtico director de orquesta que tuvo que afinar los más variados instrumentistas, los cuales adquirieron la técnica y el dominio adecuados a través del infalible magisterio impartido por este carpintero cordobés que venía de la Hermandad de la Esperanza y que entró en nuestras cofrades vidas sin apenas hacer ruido, casi en silencio, sin llamar la atención.

Requerida su profesión primero, ofrecida sin ambages su particular y mariana devoción después, desde el ya lejano otoño de 1999, esta excepcional persona ha venido siendo uno más de los cruceros que buscamos la Gloria de Dios a través del culto público hacia Nuestros Sagrados Titulares. Porque siempre lo tuvo claro, en público y en privado. Lo importante era el compromiso con la Santísima Virgen que glorificaban, con la Hermandad que los acogía, con la Católica Institución que a todos nos albergaba. Y siempre a través de la más sencilla de las oraciones, al iniciar cada tarea, al finalizarla, un Padrenuestro y un Ave María, un ruego a la Señora de la Villa anhelando Su Divino Amparo para tantos como Su Gloria buscamos. Porque siempre lo tuvo claro, en público y en privado, hacia dentro era para donde había que empujar, hacia el colectivo y no hacia la individualidad, hacia el compañerismo y la solidaridad, hacia el trabajo y el esfuerzo en común, hacia el humilde anonimato, hacia los valores que ansían la verdadera confraternidad.

Rafa es devoto mariano. Nada descubro en ello. En su corazón, seguro estoy, hay un sitio para dos advocaciones, Dolores y Esperanza, Esperanza y Dolores. De ambas Benditas Imágenes fue su capataz. De ambas, por unos motivos u otros, dejó de serlo. Por lo que respecta a su castreña devoción, hace bien poco. El pasado A.D. 2010 fue la última de las veces que puso su saber y conocimiento en conducir magistralmente ese Magno Altar con el que rendimos público culto a Nuestra Madre cada Jueves Santo. Hombre de pocas públicas palabras, multitud de silenciosos abrazos bañados de leales lágrimas, despidieron aquel Jueves Santo al que tanto había dejado, al que tanto había aportado, al que tanto nos había enseñado.

Este mismo año ha vuelto a Castro para estar en nuestro Quinario. Fue el sábado, día en el que, como sabéis, los costaleros hacen una ofrenda floral a Nuestros Titulares. La Hermandad quiso tener un detalle con él como agradecimiento por tantos e impagables servicios prestados. También lo tuvo con uno de nuestros hermanos, Salva Redondo, por igual e idéntico motivo. La cuadrilla, su cuadrilla por siempre, ya en la Casa Hermandad, con su nuevo capataz Javi Sánchez al frente, tuvo también una entrañable deferencia hacia él. Sin duda, lo que más agradeció, estoy seguro, no fueron los regalos, sino el sincero y emotivo calor humano.

Querido Rafa, esta foto de arriba representa un momento cualquiera de nuestra procesión de los que seguro has visto bastantes a lo largo de todos estos años en multitud de ocasiones. En muchas de ellas pude comprobar cómo alzabas los ojos mientras tus labios musitaban una íntima oración. Voy a utilizar esta imagen para finalizar este pequeño, sincero y merecidísimo homenaje que queremos hacerte desde este nuestro blog, el tuyo para lo que quieras. Para ello me vas a permitir que, metafóricamente, me convierta en el patero de cola al que acabas de llamar, porque esta figurada levantá va por una gran persona y un mejor cofrade:

Tarugo, esta levantá se la queremos dedicar al capataz de nuestra primera cuadrilla de costaleros, al que nunca podremos agradecer suficientemente todo lo bueno que ha hecho por nuestra Hermandad, por nuestra Semana Santa, por nuestro pueblo y por todos nosotros. Va por ti, Rafa. ¡¡La cola está, llama cuando quieras!!

Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen

Ayer, tras resolver a primera hora de la mañana los pocos trámites laborales que para un servidor trae consigo el mes en el que vivimos, entré en el blog para seguir completando, poco a poco, las páginas que hemos creado. Al introducir mi clave de blogger, el sistema abrió un mensaje en el que se nos felicitaba por la dimensión que estaba tomando el blog, proponiéndonos de paso la posibilidad de ganar dinero a cambio de hacer publicidad en este nuestro sitio. Si os soy sincero, un motivo más de orgullo -la dimensión tomada, no la posibilidad de ingresos- que te lleva en volandas a seguir quemando horas en este espacio de entretenimiento y comunicación entre cruceros.

Claro que, el adquirir determinadas dimensiones en la red trae también consigo otro tipo de inconvenientes. Entre todos ellos, uno de los más desagradables es el que durante todo el día de ayer tuvimos la desgracia de tener que padecer. En los casi dos años y medio de vida de este blog, en sus épocas más pujantes, en las más inactivas, jamás habíamos contado con la presencia de uno de los personajes más característicos de todos cuantos navegamos habitualmente por la red. En el argot se denominan trolls. Tienen una línea de actuación muy definida: entran en un espacio, otean el horizonte, ponen un pequeño cebo, esperan que alguien pique, lanzan sus proclamas -contrarias en extremo a la línea de pensamiento del mismo- y a partir de ahí a intentar reventar la concordia y el diálogo entre los habituales, que, totalmente indignados una gran mayoría de las veces con el personaje, terminan por montar un pitoste de padre y muy señor mío para regocijo del cuasi profesional dinamitero y sus adláteres.

Si observáis, ésa fue a grandes rasgos la actuación de nuestro personaje en el día de ayer. Claro, hay otras veces en las que, como se dice en Castro, se les sale el aire. Ni encuentran incautos, ni se les toma en serio, ni se establece con ellos ningún tipo de diálogo referente al tema que proponen, ni se les hace el más mínimo caso, más bien al contrario. Su reacción final suele ser siempre muy característica y definitoria de sus "inocentes intereses": insultos, faltas de respeto, amenazas, menosprecios...

Porque -todavía, aunque no por mucho tiempo- lo tenéis todo escrito en los comentarios de la entrada que el otro día publiqué sobre la JMJ 2011, a vuestro criterio dejo las conclusiones. Antes debo advertiros que falta un comentario, el publicado justo antes del que yo mismo hice, y que no tuve más remedio que borrar anoche de madrugada. Contenía un nuevo enlace y hacía alusión a Monseñor Rouco y a Su Santidad El Papa Benedicto XVI. En todo punto inaceptables las manifestaciones que en él se vertían para el blog que ha nacido en el seno de una Hermandad Católica, Apostólica y Romana. Dejemoslo ahí e intentemos no perder las formas. Lo borré, señor anónimo, como le juro que haré con todos los que considere ofensivos hacia mi credo y mi fe. Faltaría más. Es lo que tiene ser barrendero, que a veces tenemos que recoger las porquerías aunque sea tapándonos la nariz. Gajes del oficio.

Para ir terminando, unas precisiones a su último y, como puede observar, no publicado comentario. De santo, lo que se dice santo, poco, poquísimo por anunciarle algo; eso sí, en lo de pecador completamente de acuerdo, tanto como que nunca tuve la más mínima duda de que fui, soy, y con seguridad seguiré siendo, uno de ellos; por último, jugar, como beber, espero que así lo entienda, siempre sólo con quien yo quiera. Abrevio. Me llamo Nicolás de Bari, nombre de pila que heredé de mi abuelo y de mi padre, el que también he dado a mi hijo. El Santo Obispo que nos otorga apelativo, por si alguna vez tuviera que recurrir a él, resuelve con precisisión y eficacia, entre otras muchas más cosas, pérdidas y cambios de lugar. Cuando le falte algo, récele, órele, elévele sus plegarias, ya verá cómo de inmediato se le hace la luz.

Concluyo. Todo esto, queridos hermanos cruceros no es -aunque cueste creerlo- sino otra más de las consecuencias de la JMJ 2011 de Madrid. Y es que la visita de Benedicto XVI, a las pruebas me remito, está haciendo mucho daño, más del que ellos mismos imaginan, a todos los que disfrazados de laicos, aconfesionales, librepensadores y cristianos de particulares liturgias no son sino acérrimos sectarios y excluyentes anticlericales -conste que sólo con la Iglesia católica, claro-. Nada más ni nada menos. Lo dejo aquí, que ésa ya es otra batalla, o quizás sea la misma de siempre. Tal es el cariz que están tomando los acontecimientos. Otro día quizás tengamos que volver a hablar -como en anteriores ocasiones hicimos- de impuestos, de destinos, de números, de política social. No otro parece ser nuestro sino, ya que muchos aún afirman no conocerlos, o sí, y lo que en realidad están haciendo es no reconocerlos. En cualquier caso, nunca estaría de más volver a recordarlos.

Queridos todos, no debemos permitir que nadie nos achante, y menos en nuestra propia casa. Siempre con la Cruz, a través de ella, y cuando haga falta, sin miedo, la espada, y no una forjada de metal, sino de firme convicción y de comprometida palabra. Saludos.

P.S. Debido a las circunstancias excepcionales que estamos atravesando, antes de acostarme, casi de madrugada, no tuve más opción que activar la moderación de comentarios del blog. Esta misma mañana, muy temprano, se lo he comunicado personalmente a mi compi Michelna. Esperemos que esta medida, de la que jamás tuvimos necesidad en este crucero espacio, pueda tener solamente carácter provisional. Convencido estoy de ello. Espero que sepáis entenderlo.

Peregrinos de la JMJ 2011 en nuestro pueblo

Como supongo sabréis, una de las noticias de este largo y festivo fin de semana en nuestro pueblo ha sido la llegada de un grupo de peregrinos que procedentes de Argentina, de la ciudad hermana de Córdoba, se dirigían a Madrid para estar con nuestro Santo Padre Benedicto XVI durante la JMJ 2011 y que han sido acogidos por diversas familias.

A modo de somera crónica, aquí os dejo un pequeño reportaje gráfico que nos ha enviado nuestra hermana crucera M2M y del que hemos extraído algunas instantáneas que reflejan la incesante, agotadora, frenética y no por todo ello tremendamente gozosa actividad de estos tres días en los que este grupo de jóvenes tanto nos ha enriquecido.

El viernes 12, poco después de apuntar el día, llegaban a nuestro pueblo. Las imágenes siguientes recogen esos momentos de presentaciones, recogida de maletas, asignación de familias y demás, los cuales transcurrieron dentro de la más absoluta normalidad.

Una vez resuelto el tema logístico con probada eficacia, se decidió dar el resto del día libre para que los muchachos y las familias de acogida pudieran compartir -de eso decían las instrucciones que se trataba- no sólo hogar, condición sine qua non para poder acoger peregrinos y que todo el mundo sin excepción supongo que acató a rajatabla, sino también todo aquello que nos une, bastante más de lo que cualquiera, de antemano, llega a imaginar.

A las ocho y media de la tarde de ese mismo día, en la Parroquia de la Asunción, se celebró una Santa Misa de bienvenida. Oficiada por nuestro párroco Don Ignacio, su sentida homilía recorrió muchos de los lugares comunes que compartimos, la lengua, la historia, el gentilicio... y por encima de todo ello, la fe, el amor a Dios Todopoderoso, a su Hijo Redentor, a su Santísima Madre la Virgen María.

Tras la Misa tuvo lugar la procesión de antorchas. Una imagen de la Santísima Virgen en Su Inmaculada Concepción presidió el desfile que peregrinos, familias de acogida y muchos, muchos, muchos fieles castreños realizaron por las calles de nuestro simpar barrio de la Villa. El estandarte de la hermandad de Nuestra Señora de la Aurora, la música cofrade que interpretó con maestría la A.M. Santa Vera Cruz, los costaleros de la cuadrilla del palio de nuestra Hermandad dirigidos por su capataz Javi Sánchez, los cánticos que nuestros peregrinos elevaban al cielo tras cada misterio del Santo Rosario, terminaron por conformar un esplendoroso conjunto que llenó de fe y devoción tan bellas calles de nuestro pueblo.

Y como afirma el viejo adagio, de la misa a la mesa. El patio claustral de la Asunción fue el escenario de una cena de "Taleguilla", y cuyo servicio de repostería estuvo atendido por hermanos de "La Borriquita". El coro Virgen de la Salud junto a algunos aficionados locales al flamenco amenizaron por la parte cordobesa española la velada. Por la argentina, y como muestra la imagen de abajo, algunos de los jóvenes peregrinos dieron cumplida respuesta con sus guitarras. Compartir, de eso se trataba. A fe que empeño no nos faltó a ninguno para conseguirlo.

La jornada común del sábado se inició a las 10,30 de la mañana con una Misa en la Iglesia de Jesús Nazareno. Una liturgia preparada por la Hermana Juana, superiora de la hospitalaria y franciscana congregación, cautivó en torno a Jesús Sacramentado a cordobeses de ambos lados del Atlántico. Tras la Sagrada Eucaristía, en el porche de la Residencia, se obsequió a los peregrinos y a las familias de acogida con un desayuno molinero que hizo descubrir a los cordobeses de allá las muchas bondades de la dieta mediterránea.

Todo ello dio paso a uno de los momentos más emotivos de cuantos hemos tenido ocasión de vivir. Los chavales fueron divididos en grupos de cinco para recorrer las distintas dependencias de tan admirable Institución. Besos, sonrisas, caricias, amor en sumo grado fue, sin duda, lo que repartieron. Esperanza y juventud, compromiso al que libremente se adhieren y al que, por las pruebas, están más que acostumbrados. No cabe la menor duda de que no era la primera vez que lo hacían. Cristo presente en cada uno de ellos y en cada uno de los ancianos. Admirable, encantador, sublime, envidiable... Faltan palabras para definir lo que mis ojos aquella mañana vieron.

Por la tarde nos dirigimos a Baena para celebrar un acto conjunto con los muchos peregrinos acogidos también en nuestra vecina localidad. Una magnífica vigilia -enhorabuena de nuevo a sus organizadores- nos regaló también otro imborrable momento. La entrada del Santísimo Sacramento en la explanada donde se celebraba el acto, momento que recoge la imagen inmediata de abajo, hizo estremecer de emoción todos los corazones que allí nos congregamos. Si lo de la mañana en la Residencia de Jesús fue inenarrable, este momento de la vigilia supuso el culmen de una inolvidable jornada. Silencio, respeto, certeza, fe... Allí estaba con todos nosotros Jesús de Nazaret.

Como colofón a tan memorable día, por parte de la organización se dispuso una sencilla cena y un posterior fin de fiesta espectacular: un cañón de espuma que hizo las delicias de los jóvenes peregrinos, de los no tan jóvenes y de los no tan peregrinos. Madre del Amor Hermoso, cómo se pusieron. La espuma alcanzó un metro de altura con respecto al nivel del suelo. Por allí en medio, entre música cordobesa-argentina y el más rabioso tecno-pop español, había cerca de un millar de almas, así a ojo, al que no quedaba ni un centímetro cuadrado de cuerpo y atuendo sin estar completamente empapado de agua y espuma. Sin ningún género de dudas, disfrutar disfrutaron como enanos.

Ya el domingo, a las doce, y nuevamente en la Parroquia de la Asunción, se celebró una Santa Misa de despedida. Oficiada por uno de los sacerdotes argentinos, otra vez -ésta con ese particular acento con el que hablan- se volvieron a recorrer emocionadamente muchos de los momentos vividos en los últimos días. La llegada, los gestos, los besos de bienvenida... La pequeña procesión, la música, la luz de las antorchas... Los ancianos, la vigilia, tanto como hemos compartido, tanto como hemos intercambiado en las últimas horas... Emotivo momento también el que auspició uno de nuestros castreños seminaristas, José Ángel Arévalo. Pocas palabras le bastaron para explicarnos, con sincera y firme convicción, el mensaje que un buen día dejó Nuestro Divino Redentor en su corazón, su necesidad de seguir sus designios desde aquél entonces, su certeza ante la llamada vocacional que, Dios siempre mediante, pronto lo ordenará sacerdote.

A las cuatro de la tarde estaba prevista su partida hacia nuestra Córdoba. Allí los esperaba una visita a la Catedral y varios actos más durante el resto de aquel domingo, para ayer lunes, creo, partir ya hacia Madrid. A pesar de los cuarenta y seis grados del ferragosto, a pesar de la demora del autobús, a pesar del riesgo de insolación al que innecesariamente peregrinos y familias fuimos sometidos, con ellos quisimos estar hasta el último instante para ayudarlos a cargar su equipaje, para despedirnos antes, durante y después que se pusieran en marcha, para agradecerles todo lo mucho que en tan pocas horas nos han dejado. Y así lo hicimos. En la inclemente espera, y en la no deseada partida, entre fotos, abrazos, besos, alguna lágrima, manos que se agitan, gestos que se devuelven, una atropellada y gozosa prisa por hacer un gran hueco en el corazón donde dar cabida a tanto recibido...

Porque el aldeanismo nacionalista dicen que se cura viajando, porque sólo existe una Iglesia única y universal como tan bien habéis demostrado, sólo resta daros las gracias, mil veces mil, un millón. Permitidme, desde este espacio de cruceros, que os eleve un ruego: sed también heraldos ante Su Santidad en esta JMJ de Madrid 2011 de este pequeño pueblo de la campiña cordobesa en el que tanto ejemplo habéis dejado. Para ello, que Dios Todopoderoso os bendiga. Que con su Omnipotente Poder siempre os acompañe, os proteja y os guíe.

P.S. Ésta ha sido mi familia durante los días 12,13 y 14 de Agosto. Anticipado perdón reclamo si a alguno molesta la foto y la autocita, pero es que no tengo más imágenes de ninguna otra hasta que Pedro J. Miranda me pase las que me ha prometido. Además, que las niñas a las que acogimos son las más guapas que vinieron y quería presentároslas, je, je. Son Flor y Belu.

P.S.2: Como siempre, tal como hemos dicho otras veces, nada nos gustaría más que los muchos que -nos consta- leéis, dejaráis también vuestros testimonios y vuestros comentarios. Del tema de hoy seguro que hay miles. Igual que un servidor, muchos también habéis participado, que os he visto.

Un nazareno va contigo, Buena Muerte

Para ir combinando temas que se remontan en el tiempo con otros más actuales, tenía intención de hablaros hoy de las muchas peculiaridades con las que vino cargado el Miércoles Santo de este año de Nuestro Señor Jesucristo de 2011. Pensaba escribiros sobre lo mucho que aquellas -las peculiaridades- me trasladaron a las procesiones de mi infancia, cuando farol en mano y atento siempre al sonido de la campanita para depositarlo en el suelo, recorríamos las calles de nuestro pueblo en Estación de Penitencia poco más de medio centenar de personas en un casi absoluto y oscuro silencio, roto sólo por el susurro del rezo del rosario.

Quería contaros algo sobre los pocos penitentes que aquella noche fuímos, sobre la certeza y el convencimiento allí alcanzados, sobre los escasos que decidimos envolver nuestro cuerpo en la morada túnica y cubrir nuestro rostro con el negro del luto, sobre los que siempre terminamos por buscar la explicación, a tanta significativa ausencia, en el evangelio que afirma que muchos son los llamados pero pocos los elegidos.

Pensaba escribir sobre todo ello, y para dar un aspecto "retro" a la entrada, me entretuve en preparar ad hoc unas fotos de nuestro amado Titular para poder mostraros los prodigios técnicos que me instaló el otro día Michelna, para poder compartir con vosotros lo que son capaces de hacer. En fin, quería hablaros también de la Buena Muerte del Señor, de las intimidades perfumadas de incienso, del tintineo de la luz reflejada fuego ardiente en Sus plateadas potencias, de la cera derretida que muere como Él vuelta luz para alumbrar lo que habrá de venir, del rojo y del morado en la flor, del tibio olor de la noche en primavera... Quería hablaros de todo ello y de mucho más, porque en el fondo, lo que quería deciros es que pensé dedicar una entrada a nuestro olvidado Miércoles Santo.

Pero nada de ello pienso hacer, ya habrá más ocasiones. Sólo voy a publicar una de las fotos y algunas palabras porque, cambiando de tema, me gustaría hablaros de un nazareno que durante muchos años luchó y se esforzó denodadamente para que cada Viernes Santo, al apuntar el día, el que carga injustamente con la Cruz volviera a salir de su templo evangelizando a un pueblo entero a través de su Bendita Imagen. Me gustaría hablaros también de un padre que supo transmitir a sus descendientes la pasión y la entrega, la fe y la devoción, el honor y el compromiso que supone ser cofrade y seguidor de Jesús de Nazaret. Me gustaría hablaros de un hombre sencillo, leal y franco, campechano, al que no llegué a conocer en profundidad, hecho que tampoco me hizo ninguna falta para comprobar que cada vez que me saludaba apretándome la mano y dándome una palmada en la espalda, tenía frente a mí un hombre cabal, un señor, un caballero.

Hoy, porque así quiero hacerlo, me gustaría hablaros de una persona de envidiable humanidad a la que no importaba lo más mínimo anegar sus ojos en lágrimas cuando así lo estimaba conveniente. En mi retina guardo algunas de esas ocasiones, dos de ellas muy especiales: el Viernes de Dolores de 2004 cuando una de sus hijas glosó la Semana Santa de su pueblo, y el Jueves Santo de 2006 cuando estuvo en el nuestro para ver cómo uno de sus nietos había seguido, literalmente, sus pasos. Sin duda, os puedo asegurar que, difícilmente, podrá apreciarse nunca una persona más henchida de dicha y de gozo, del más legítimo de los orgullos.

En fin, me gustaría hablaros de muchas más vivencias, relataros más anécdotas, pero no las creo en absoluto necesarias para poder afirmar que en el día de ayer, festividad de San Lorenzo mártir, Dios Todopoderoso llamó a su lado a un buen hombre, a una extraordinaria persona, a uno de sus mejores y más fieles nazarenos. Y porque siempre nos quedará el consuelo de la esperanza, de la fe y de la certeza a las que, como creyentes, abrazamos con convicción en nuestro credo, en su memoria quisiera elevar esta pública plegaria, esta sincera oración, implorando a ese Nazareno al que nuestro culto crucero advoca Santísimo Cristo de la Buena Muerte para que lo acoja en su Gloria, para que le otorgue la paz y el descanso eternos. Señor Jesucristo que cada Miércoles Santo amparas las Ánimas de nuestros difuntos, en Tu poder infinito, Muerte que vences a la muerte, con humilde devoción Te ruego que, en Tu omnipotente voluntad, así sea.

Cualquiera no se daba por enterado

Reiniciamos la publicación de lo que hemos dado en definir como documentos curiosos con uno que, a buen seguro, os va a gustar. Antes, una pequeña introducción para situarlo en su contexto. Como bien sabemos todos los que formamos parte del Turno de Mayores de nuestra querida Institución, la forma más corriente de recibir las citaciones para cualquier acto, especialmente los cabildos, es a través de un Saluda en el cual el Hermano Mayor nos participa de la correspondiente celebración. Un pequeño inciso: hombre, igual los que cohabitáis en la misma casa con más de un hermano en Vera+Cruz no lleguéis nunca a recibir personalmente una citación cada uno; unas veces será un solo Saluda con cuatro o cinco etiquetas pegadas en las que figuran los correspondientes nombres, otras un único sobre con varios Saludas dentro para que, una vez abierto aquél, los propios interesados se repartan las hojas entre ellos. Últimamente se ha puesto también de moda una nueva fórmula: si te pillan por la calle te dan un Saluda sin sobre, ni etiqueta, ni nada que se le parezca -ahorro elevado a, casi, la máxima potencia-. No todo queda ahí: para casos de extrema necesidad -ahorro elevado a la enésima potencia- otro gran paso para la Humanidad: te ven pasar, o tomando una cervecita, y a viva voz te anuncian que el cabildo es el domingo a las doce donde siempre; vamos, más que despachado. Hay que entenderlas, hermanos. Son las soluciones de nuestro equipo económico para tiempos de crisis. También las aplica para los de bonanza, no vayamos a relajarnos. Dispendios, como bien sabéis, los justos, que a ver cómo pagamos tantos delirios y tantos innecesarios despilfarros. Tacita a tacita, decía el anuncio.

A lo nuestro. Fijáos si es importante el tema de las comunicaciones que hasta los propios Estatutos vigentes reflejan con exactitud y claridad cuál es la forma de hacerlas, en qué plazo y con qué contenidos concretos. Consienten, empero, la figura de un cursor -avisador en román paladino- para realizarlas y por ahora, ni en los que nos fueron aprobados en el año 2000 ni en la posterior ampliación reglamentaria de 2008, se hace la más mínima referencia a la validez, o no, de las cursadas a través de las nuevas tecnologías -sms, mail...-. Habrá que consultarlo.

Como casi todo está inventado, aquí os dejo hoy un antiguo y sencillo modelo de citación, aunque no por ello menos efectivo. Una hoja impresa con los nombres de todos los hermanos del Turno de Mayores con un espacio al lado para que cada uno pudiera poner su firma o rúbrica, dándose así por debidamente convocado. Vamos, que quien no asistiera tendría que exponer en su descargo una buena excusa. Hablando de ellas, me acaba de venir a la memoria cuando Don Antonio Peñafiel -a quien Dios tenga en su Gloria- te reclamaba la tarea y uno, cómo decirlo, pues no la había hecho. Intentando hablar con la máxima credibilidad, cosa imposible para tan pocos años, uno exponía, luchando denodadamente por no tartamudear, que la tarea...verá usted, ayer pues..., no sé si sabe que..., sí hombre, que ya le comenté hace poco que a lo mejor hoy no... pero que mañana le prometo que traigo la tarea de todo el trimestre próximo, cuentas de dividir por tres incluídas... Don Antonio, circunspecto, te miraba por encima de las gafas mientras venía hacia ti para apreciar de cerca el supuesto mar de dudas y angustias que te azoraba; dibujando una mueca que nunca llegué a descifrar si era de sorna o convencimiento, decía:

-¡Individuo, tipejo indecente! medio minuto tiene usted para inventarse una buena excusa. Pero que sea buena -estas útimas palabras las solía exclamar con elocuencia mientras asía con fuerza los pelos de la patilla, empujándolos al mismo tiempo contra natura hasta conseguir que el poco aplicado alumno estuviera dispuesto a declararse culpable, incluso, de la muerte de Manolete si hacía falta- porque, en caso contrario, hablaré con su señor padre y no verá usted la luz del sol hasta que San Juan baje el dedo. En su infantil inocencia uno entendía que aquello podía alargarse indefinidamente en el tiempo. Vamos, que con un dedo de madera, como para albergar alguna esperanza...

Pues con lo que hoy nos ocupa pasaría poco más o menos igual. No valían las excusas -a no ser que fuera buena- para el sacerdote de aquel tiempo, Don Julián Caballero Peñas -el primer nombre que aparece en la segunda hoja-. Y es que para tener que poner en marcha una medida de este calado, ya os podéis hacer una idea de la necesidad que había de obligar a estos hermanos de 1953 a que asistieran a los cabildos para intentar comprometerlos de alguna forma con la Institución. Todo era debido a que, tras su reorganización en 1941, la Hermandad se encontraba prácticamente inactiva, languideciendo poco a poco, llegando a darse el caso extremo de no realizar, en los años posteriores a la fecha de estos documentos, más actividad que el desfile procesional del Jueves Santo. Entre los pocos que eran -treinta y tres, el número mágico de la Semana Santa de Castro- y el tiempo histórico que les tocó vivir, Don Julián, que según cuentan era un cura de armas tomar, inventó este novedoso sistema para citar, obligando su asistencia, a los reticentes hermanos; en el fondo no era sino una forma de solicitar un más firme compromiso en pos de que la Hermandad no desapareciera. Aún así, como decíamos en una entrada anterior, hubo que esperar a la "Taleguilla" de 1971 para comprometer una Junta de Gobierno dispuesta a trabajar por la secular Congregación. Hoy, cuarenta años después, a fe que lo hicieron. Lo que sí desconozco, y mira que he preguntado, es el castigo a aplicar sobre aquellos ausentes no debidamente excusados. Supongo que no se les tiraría de las patillas ¡con lo que dolía aquello! Es broma ¿Algún silicio, o algo parecido, tal vez? Sigue siendo broma.

Por hoy, punto y final. Leed los nombres que aquí aparecen. Muchos comprobaréis que pertenecen a vuestros padres o abuelos, a tíos o parientes. Nada nos gustaría más que nos dejaráis algún comentario al respecto. Sólo dos de ellos siguen perteneciendo al Turno de Mayores, el nº 1 actual, Don Francisco León Moreno y el nº 2 de los que aún somos, Don José Antonio Luque Serrano.

P.S. La página que hemos dedicado a los romanos de nuestra Hermandad ya la tenéis casi hecha, aunque aún no completamente terminada. En cuanto haya tiempo procederemos a configurar su aspecto definitivo. Otra cosa: el personal que, voluntariamente, se ha ofrecido a realizar algunas tareas para las nuevas páginas ya está tardando. Aunque no estamos tan mal, al loro, como dicen los de la esquinita, no vayamos a tener que pegar algunos tirones en las patillas mientras se oye aquello de "tipejillo indecenteeeee, la tareaaaaaa". Saludos.

Más vale tarde que nunca

Como dije el otro día, ya de vuelta de mi período vacacional playero. Así que, una vez debidamente en orden algunas urgencias de índole doméstico y profesional, me incorporo de nuevo a este gozoso tajo.

Hace ya tiempo, desde principios de verano, queríamos dar la más cordial bienvenida a nuestra gran familia crucera a un nuevo grupo humano que definitivamente se ha incorporado a ella. Éste no es otro que la recién constituida Agrupación Musical Santa Vera Cruz, porque ése y no otro es el hermoso nombre con el que este grupo de chavales, de incondicionales cruceros, y también cruceras que haberlas haylas, han decidido bautizar a su Agrupación. Una gran mayoría de ellos acrisolan ya una amplia experiencia en este enriquecedor mundo de la música cofrade. Otros, muy jóvenes, están empezando a dar sus primeros pasos en él. Todos juntos, porque no puede haber más camino posible, demostraron en la pasada festividad del Corpus, no sólo que no han perdido ni un ápice de su ya contrastada categoría musical, sino que siguen ensayando, con esfuerzo y dedicación, en pos de mantenerlo y de superarlo. Encomiable tarea a la que desde aquí mostramos nuestro más firme apoyo.

Para los más habituales a este espacio, supongo que habréis advertido desde hace tiempo la existencia de un enlace a una web creada por la nueva Agrupación. Para los que no, ya os confirmo que lo podéis buscar en el sitio correspondiente. Haced el favor de entrar en ella y veréis cuáles son las intenciones. Justo en la portada está nuestro signo identificativo, el que nos protege y nos impulsa a todos, el que nos da título, esperanza y voluntad, el Árbol de la vida, la Venerable y Santa Vera Cruz ¿Existe acaso mejor forma de sumarse a la utopía?

No me alargo más, que me han dicho que muchos se asustan con mis ladrillazos. Simplemente, componentes de la Agrupación Musical, bienvenidos de nuevo a esta vuestra Hermandad. Ya sabéis dónde estamos y quiénes somos, La Primera. Os dejo una foto de la una de las bandas de cornetas y tambores que perteneció a nuestra Institución. La idea, aunque no estoy seguro de este dato, duró casi dos décadas en dos etapas distintas. Como sabéis, por impulso de un sacerdote castreño, Don Rafael Bravo Carpio (q.e.p.d), que curiosamente no sabía tocar la corneta y mucho menos el tambor, en la segunda de esas etapas de las que hemos hablado, muchos jóvenes castreños aprendimos a tocar alguno de estos instrumentos y, de una u otra manera, nos acercamos al mundo interior de las cofradías. Esta imagen corresponde al Paseíllo de 1975, último año en el que salió esta banda -desavenencias de algunos de sus componentes con la propia Hermandad dieron al traste con el invento-. Luego, con los mismos instrumentos, hubo un par de intentos o tres por refundarla. Ninguno cuajó lo suficiente. Ahora vosotros habéis cogido de nuevo el testigo. Ojalá dentro de tres décadas y media, alguno pueda mostrar una foto de la banda que salió por primera vez tras la Divina Pastora un caluroso domingo de Junio de 2011. Ojalá, dentro de tres décadas y media, alguno pueda mostrar con orgullo que la Agrupación Musical Santa Vera Cruz sigue existiendo. Ése es el reto. Juventud, fuerzas y espíritu cofrade tenéis de sobra para luchar por él.

P.S. Gracias al hermano de turno que firma un comentario como "duda o queja" por las gentiles palabras con las que nos obsequió el pasado 26 de Julio en una entrada antigua referida al Jueves Santo de 2011. Celebramos con enorme satisfacción que te hayan gustado los contenidos de este humilde espacio. Tal hecho nos da fuerzas para seguir insistiendo en tan grata tarea.

En otro orden de cosas y antes de pasar a contestar la pregunta que "te gustaría se te respondiese"- "duda o queja" dixit-, si me lo permites, me complacería aconsejarte que a la hora de realizar comentarios en alguna entrada los efectúes siempre en las últimas publicadas, ya que en caso contrario -como el que ahora nos ocupa- corres el riesgo de que, excepto cuatro participantes cansinos como un servidor, tus palabras no las lea ni "el tato", valga la expresión, ya que, con el sistema de almacenamiento de este tipo de blogs, las entradas antiguas terminan por acumular días en el más informático de los limbos.

Así pues, y con la mejor intención de complacer tu para nada ofensiva pregunta con respecto a algunas incorrecciones por ti observadas este pasado Jueves Santo, debo responderte que a tu entera disposición quedo para cuantas dudas o quejas tengas a bien demandarme. Ahora bien, lo que ya no considero apropiado es darte cumplida respuesta por este medio. Cualquier día que nos crucemos por la calle, cualquier vez que nos veamos por la Casa Hermandad, en cualquier tiempo o lugar en los que puedan entrelazarse nuestros caminos, no tienes más que abordarme, volverme a formular tus dudas o quejas, y servidor, gustosamente, te dará las razones por las cuales,el pasado Jueves Santo, llevaba su escapulario identificativo colgado al cuello y, efectivamente, no llevaba puesta la "TÚNICA de sarga morada con cola que irá ceñida al cuerpo mediante un cordón de pita o esparto coloreado en amarillo, y que, partiendo desde el cuello, se entrelazará hasta la cintura, donde terminará por anudarse dejando ambos extremos que caigan sueltos paralelos a ambas piernas" que sin ser cita textual, es como definen, más o menos, nuestros vigentes estatutos el HÁBITO que deben llevar todos los nazarenos que pretendan hacer Estación de Penitencia cada Jueves Santo.

En fin, en la humilde aspiración de que tus peticiones hayan quedado complacidas, recibe el más cofrade de los saludos, reiterándote con él mi entera disposición a intentar despejar cuantas dudas o quejas, personales o institucionales, puedan surgirte. Un abrazo en Vera+Crux.