Curiosidades

Hace unos días, en el sitio que algunos dieron en llamar "El Pulpitillo", en animada tertulia con uno de nuestros hermanos en Vera Cruz, Joaquín Villatoro -no confundir con el músico, ojo-, se me ofreció para su publicación esta curiosa foto que hoy traemos. Decir que la misma se realizó en la Semana Santa de 1997 en la que nuestro Hermano Mayor fue José Luis Fernández Castillejo y León, tapado en la imagen, excepto la parte superior del báculo que portaba, entre otros, por nuestro Albacea Mayor de la época, Miguel Navajas Aparicio -de los Aparicios de toda la vida, Chico dixit-.

El instante que quedó inmortalizado corresponde a la recogida protocolaria que hace nuestra Escolta Romana -a la sazón comandada aquí por Paquito Porcel- de todos y cada uno de nuestros hermanos mayores. Nada, por tanto, tendría de particular el momento si no fuera porque en la instantánea aparece también nuestro guión portado por otro de nuestros hermanos en la Santa Cruz de Nuestro Señor Jesucristo, nuestro apreciado Gori Díaz. Y en tal hecho estriba la singularidad, que según apunta Joaquinito, alberga un motivo que particularmente desconocía. Tanto es así que he preguntado por ahí y no hay quien me dé norte del hecho. Ahí lo dejo. Si tenéis ganas y tiempo, a investigar a ver quién es capaz de aportar aquí una solución razonable al misterio.

Para ello, a ver si dejamos aparcados corridos y valonas, huapangos y chilenas. Y así, sin arpa ni violín, sin trompeta ni violón, sin salterio ni requinto, sin vihuela o bandolón, rematemos la rima afirmando que es también tradicional instrumento un gran guitarrón, con el cual, como alborotador chiquillo, me gustaría deciros que sigue donde estaba el armado guión; del mismo modo que el soporte relicario en el fresco pasillo, por lo que, como con ambos en renuncio os pillo, sirva la presente para solicitaros que, en guardarlos, en ferviente y devota hermandad gastéis un ratillo. 

Por si a alguien no le han gustado estos "maravillosos ripios emanados de mi siempre modesta y, a la vez, vibrante poesía" que, dicho sea de paso, como casi siempre, he compuesto de manera improvisada, como el que no quiere la cosa, en un papelillo escrito por una cara que había aquí en la mesa (Señor, Señor, qué difícil arte éste de componer versos, reservado sólo a las mentes precoces y privilegiadas de los mejores juglares, quienes con su exacerbado lirismo luchan por mantener y enriquecer el acervo cultural y afectivo de los pueblos), pongo la cosa del mensaje -no vaya a ser que alguno no lo entienda por falta de "sensibilidad poética"- también de manera más prosaica: "Perrasos" -Correones dixit hace tiempo-, que se acaba el verano y no le habéis pegado un palo al agua. Lo que os llevasteis, ya estáis tardando en ponerlo de nuevo en su sitio. En vuestro descargo, espero que, al menos, las composiciones sean buenas. Lo dicho, la foto.